Por: Javier Pico
Un escenario donde el conocimiento emociona y entretiene, un momento en el cual la comicidad del discurso hace de una clase convencional un espacio lleno de situaciones graciosas, en donde los contenidos académicos son recordados por los ejemplos hilarantes con los que se referencia y justo allí la disrupción cobra relevancia, el resultado es una clase divertida y memorable que logra que los asistentes se apropien de la teoría y al final del semestre sustenten con su propio stand up resumiendo lo aprendido, el propósito hacer reír a tus compañeros, así que si te ríes y haces reír pasas.